Ignacio Escobar, alumno del 1D del Liceo Politécnico Ireneo Badilla Fuentes comenzó el segundo semestre del año escolar con una máquina de escribir Braille que entregó el Alcalde Mario Meza en comodato al Programa Integración Escolar del establecimiento, mientras el joven estudiante en situación de discapacidad de origen visual postula a la adquisición de una propia por medio del SENADIS.
Esta herramienta tiene la ventaja de escribir inmediatamente en relieve cada letra, lo cual puede ser verificado al tacto sobre el papel sin necesidad de sacarlo ni darlo vuelta. Posee seis teclas correspondientes a cada uno de los puntos de la celdilla Braille, una tecla central más ancha o espaciador, una tecla de reverso al lado derecho y una para correr el papel a la línea siguiente. Esta máquina es de uso corriente en escuelas, muy recomendable para estudiantes deficiencia vidual, portable y puede adaptar 25 líneas con 42 celdas en una hoja de papel, permitiendo la facilidad y velocidad necesarias al estudiante parea llevar adelante la educación en instituciones convencionales de manera integrada.
“Estoy contento porque ahora puedo tomar apuntes en las clases, antes con la regleta escribía mucho más lento. Ahora escribo más rápido, mejoro mi escritura y lectura y me pongo al día con mis materias” comentó Ignacio Escobar, el directo beneficiario de este aparato.
El alcalde Mario Meza comentó respecto a esta iniciativa: “Sin duda estamos trabajando para optimar la calidad de la educación de Linares, junto al Departamento Comunal de Educación (DAEM). Esta iniciativa muestra que con pequeños detalles se puede mejorar la calidad de vida de un niño, ya que la integración es primordial para tener establecimientos mejores. No sólo queremos resultados educacionales, sino una formación integral. Cuando fui al politécnico vi el caso en persona”.
Finalmente, Nayade Poblete, Educadora Diferencial del Liceo Politécnico Ireneo Badilla Fuentes señaló “el propósito de esta máquina es que la lectoescritura del estudiante se produzca de forma más fluida y rápida, él estaba acostumbrado en su escuela anterior a escribir en máquina y no en regleta, que es más lenta y más tediosa, por eso para Ignacio lo más cómodo era contar con esta herramienta que se incorpora ahora al inicio del segundo semestre”.